Óscar Medina “Turismo Dominicano En Crisis De Imagen Tras Desaparición De Joven India En Punta Cana”

La desaparición de Sudisha Koneru, una joven india-estadounidense en Punta Cana, ha puesto en jaque la imagen del turismo dominicano. Koneru fue vista por última vez en la madrugada del jueves 6 de marzo en la playa de Bávaro, después de haber salido del hotel junto a un grupo de amigos.

Las autoridades dominicanas han desplegado un amplio operativo de búsqueda, incluyendo drones, helicópteros y equipos de rescate especializados. Sin embargo, la falta de resultados ha generado especulaciones y conjeturas en medios internacionales, especialmente en Estados Unidos, donde el caso ha cobrado gran notoriedad.

Uno de los puntos de controversia ha sido un informe del New York Post, que atribuyó la salida del grupo a un supuesto apagón en el hotel, versión desmentida por las cámaras de seguridad. En las imágenes se observa a los seis jóvenes caminando hacia la playa en una zona bien iluminada, desmintiendo cualquier problema de energía.

El padre de la joven ha manifestado su angustia y ha pedido que se extiendan las búsquedas a tierra, ante la posibilidad de un secuestro. Esta teoría ha sido reforzada por el impacto mediático del caso, con numerosos medios estadounidenses destacando la desaparición y generando preocupaciones sobre la seguridad de los turistas en la región.

En medio de la crisis, se ha recordado la campaña mediática de 2019, cuando varias muertes de turistas fueron utilizadas para cuestionar la seguridad en los resorts dominicanos. En aquel entonces, el gobierno dominicano contrató agencias especializadas en crisis comunicacional en Nueva York para mitigar el daño a la industria turística.

Ante la creciente presión, el Ministerio de Turismo ha sido instado a actuar con mayor protagonismo en la comunicación del caso, ya que hasta el momento las vocerías han recaído principalmente en organismos de rescate y la Defensa Civil. La preocupación es que la narrativa mediática pueda afectar la percepción de seguridad del país, perjudicando la afluencia de turistas.

Mientras continúa la búsqueda de Koneru, las autoridades deben equilibrar la transparencia en la investigación con la protección de la reputación turística del país. La gestión de crisis y la comunicación estratégica serán clave para evitar que el caso se convierta en un golpe para el sector turístico dominicano.