Destituyen A Mike Waltz Tras Escándalo De Conversaciones Filtradas En Signal

Washington D.C., 1 de mayo de 2025 — A mes y medio del escándalo por la filtración de conversaciones sensibles en un grupo de Signal, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha destituido a su consejero de Seguridad Nacional, Mike Waltz. En un giro que combina castigo con premio, Waltz será trasladado al cargo de embajador ante la ONU, según anunció el propio Trump en una publicación en su red Truth Social.

“Me complace anunciar que propondré a Mike Waltz como próximo Embajador de los Estados Unidos ante las Naciones Unidas”, escribió el mandatario, resaltando su “compromiso con los intereses de la nación”. Mientras tanto, el actual secretario de Estado, Marco Rubio, asumirá temporalmente las funciones de Seguridad Nacional sin dejar sus responsabilidades actuales.

El escándalo, conocido ya en círculos políticos como el ‘Signalgate’, estalló tras la publicación de un grupo de conversaciones filtradas por The Atlantic, en las que altos funcionarios de la Administración discutían información clasificada sobre una operación militar contra los hutíes en Yemen. Waltz, creador del grupo, cometió el error de añadir accidentalmente al editor en jefe de la revista, Jeffrey Goldberg, quien reveló las conversaciones días después. En ese chat estaban también presentes Rubio, el vicepresidente J.D. Vance y el secretario de Defensa, Pete Hegseth.

Según la publicación, fue Hegseth quien detalló la noche anterior al ataque del 15 de marzo los tipos de armamento, objetivos y el cronograma del bombardeo. Aunque la Casa Blanca negó inicialmente la autenticidad del chat, la posterior publicación íntegra del mismo por The Atlantic obligó a reconocerlo parcialmente. Aun así, minimizaron su gravedad alegando que no se había comprometido “información crítica”.

La salida de Waltz marca la primera destitución de alto nivel desde que Trump asumió el poder en su segundo mandato, hace poco más de 100 días. La cadena CBS, que adelantó la noticia, sugiere que su sucesor permanente podría ser Steve Witkoff, actual enviado especial a Oriente Medio y figura clave en las negociaciones con Irán y en el conflicto de Ucrania.

Más allá del escándalo, el perfil intervencionista de Waltz generaba incomodidad en el entorno de Trump. A diferencia de Rubio, quien ha moderado su discurso en política exterior, Waltz continuaba impulsando una línea dura hacia Rusia e Irán, lo que lo distanciaba del enfoque pragmático del presidente.

La presión para removerlo venía creciendo desde sectores afines al trumpismo, incluyendo la activista Laura Loomer, quien en una reciente reunión en Mar-a-Lago lo había incluido en su lista negra de funcionarios a reemplazar.

Con esta decisión, Trump lanza una advertencia a su entorno: la lealtad y la disciplina comunicativa serán condiciones innegociables para formar parte de su círculo de seguridad nacional.