Intervienen De Emergencia Escuela En Barahona Tras Desprendimiento De Techo
May 10 , 2025
La Dirección de Infraestructura del Ministerio de Educación informó que envió una brigada de emergencia a la escuela Fidelina Medina, en la comunidad de Guázara, provincia Barahona, luego de que se desprendiera parte del revestimiento de cemento del techo en un aula. La medida fue tomada de inmediato para evitar riesgos a la comunidad educativa y asegurar la continuidad de las clases.
El equipo técnico desplazado en la escuela, inspeccionó toda el área afectada, removió el material suelto, repuso el revestimiento dañado y reforzó zonas contiguas para prevenir incidentes similares. Además, técnicos del Ministerio y de la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad de Infraestructura y Edificaciones Escolares (Onesvie) realizan una evaluación estructural completa del centro, que será incluido en el programa nacional de mantenimiento correctivo. Las labores se desarrollan en coordinación con la dirección del plantel y también incluyen medidas de limpieza y protección del espacio escolar.
Más detalles
La comunidad educativa de La Guázara, en Barahona, se mostró preocupada tras el colapso parcial del techo en el área administrativa del centro educativo Profesora Fidelina Félix Matos, lo que obligó a la suspensión temporal de las clases. El incidente motivó la intervención del director del Distrito Educativo 01-03, Nelson Espinoza, y el ingeniero Ramón Jerónimo, encargado de obras regionales, quienes realizaron un levantamiento técnico. Aunque se indicó que el desprendimiento fue parcial y otros módulos del edificio “no presentaban peligro”, tanto la Asociación de Padres, Madres y Amigos de la Escuela (APMAE) como la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) expresaron su desacuerdo, alertando sobre grietas, filtraciones y otros daños que podrían haber puesto en riesgo la seguridad de los estudiantes y el personal docente.
El accidente, que afectó a 256 alumnos, generó preocupación entre los padres, quienes exigieron atención inmediata del Ministerio de Educación para evitar posibles tragedias. La situación obligó a suspender las clases hasta el 10 de mayo, mientras se evaluaron los daños estructurales del centro educativo. En respuesta, se plantearon medidas preventivas, como la implementación de inspecciones periódicas en las escuelas públicas y la creación de canales de comunicación eficaces entre las comunidades escolares y las autoridades. Estas acciones no solo buscaron garantizar la seguridad, sino también asegurar que el entorno educativo fuera adecuado para el aprendizaje y desarrollo de los estudiantes.