Liberan Al Alcalde De Newark Tras Arresto En Protesta Frente A Centro Migratorio

NUEVA JERSEY.– El alcalde de Newark, Ras Baraka, fue arrestado este viernes durante una protesta frente al Centro de Detención de Inmigrantes de la Nhall de Nueva Jersey, tras un altercado con agentes de la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). La protesta, organizada por activistas del movimiento Cosecha, buscaba denunciar la apertura de un centro de detención que, según los manifestantes, aún no cumplía con los requisitos legales para su funcionamiento, como la inspección de seguridad y contra incendios.

Según los testigos, Baraka, junto a los congresistas demócratas Robert Menéndez Jr. y Bonnie Watson Coleman, intentó acceder al centro para solicitar una inspección de las instalaciones. Tras un intercambio verbal con los agentes federales, los políticos fueron detenidos en medio de forcejeos. La detención fue confirmada por la fiscal federal para el distrito de Nueva Jersey, Alina Java, quien indicó en un mensaje en su cuenta de X que Baraka había ignorado las advertencias del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y había incurrido en allanamiento de morada.

El arresto causó gran indignación entre los seguidores del alcalde, quienes se agolparon frente a las oficinas del DHS en Nueva Jersey, exigiendo su liberación inmediata. Baraka fue liberado aproximadamente cuatro horas después, en medio de una multitud que celebraba su salida. Durante su liberación, el alcalde declaró que no había hecho nada malo y criticó lo que consideró un abuso del poder autoritario por parte de las autoridades.

El Departamento de Seguridad Nacional, por su parte, aclaró que los congresistas no están por encima de la ley y que cualquier solicitud para visitar el centro hubiera sido facilitada, sin necesidad de forzar el acceso. A pesar de las tensiones, los activistas y políticos continúan exigiendo una mayor transparencia y regulación sobre las instalaciones de detención migratoria.

El incidente ha generado un intenso debate sobre el trato a los inmigrantes y las políticas de detención en Estados Unidos, con muchos críticos acusando al gobierno de utilizar métodos autoritarios para silenciar a los opositores. Activistas y defensores de los derechos humanos han señalado que situaciones como esta reflejan un clima de represión en torno a las políticas migratorias, y han subrayado la necesidad de mayor supervisión y transparencia en los centros de detención. Mientras tanto, el alcalde Baraka reafirmó su compromiso con la lucha por los derechos de los inmigrantes, asegurando que seguirá presionando para que se respeten las leyes y se garantice un trato justo para todos.