Medina ¿Por Qué Se Llevaron Preso Por Segunda Vez Al “Detective”?

Ángel Martínez, conocido como “El Detective”, fue arrestado por segunda vez, esta vez por orden del Ministerio Público de Santiago. Aunque inicialmente enfrentaba una orden de arresto por no comparecer ante la justicia en una demanda por difamación presentada por el diputado Gory Moya, ahora la Fiscalía investiga cargos mucho más graves: extorsión y chantaje, en un expediente interpuesto por el empresario Arnulfo Gutiérrez.

Martínez fue detenido mientras se encontraba en un hotel, luego de haber evadido en dos ocasiones recientes una citación formal del Ministerio Público para ser interrogado. Su detención busca garantizar su presencia ante las autoridades judiciales, ya que el expediente que se le sigue en Santiago podría implicar penas de 4 a 10 años de prisión, según lo establecido en el Código Penal.

De acuerdo con la acusación, Martínez habría vinculado públicamente en sus redes al empresario Gutiérrez con el exdiputado Miguel Gutiérrez, actualmente preso en EE.UU. por narcotráfico. Sin embargo, según la parte demandante, no existe relación entre ambos. La Fiscalía sostiene que Martínez, a través de una supuesta emisaria identificada como Vanessa Victoria, habría solicitado 300 mil dólares para detener una “campaña de descrédito”.

Este nuevo expediente se suma a las múltiples demandas civiles que Martínez enfrenta por difamación, incluyendo una de la diputada Faride Raful, quien reclama 50 millones de pesos por daños. No obstante, esta vez no se trata de un “delito de opinión”, sino de cargos penales con consecuencias mayores.

“El que no responde a las citaciones, el Ministerio Público tiene que buscarlo, sea quien sea”, señaló una fuente cercana al caso. Y es que, pese a haber intentado evitar la comparecencia alegando problemas de salud, incluso publicando una foto con un electrocardiograma, su versión fue desmentida públicamente por su propio médico.

El arresto de Ángel Martínez ha reabierto el debate sobre la responsabilidad de los medios y el uso de las plataformas digitales para difamar sin consecuencias. “Durante años se vendieron como justicieros, ahora enfrentan las consecuencias de su propia medicina”, expresó el comentarista Óscar Medina.

Martínez, quien en el pasado fue entrevistado por medios de prestigio, hoy enfrenta un momento crítico en su carrera y su credibilidad pública. De probarse los cargos, el caso podría marcar un precedente para las figuras mediáticas que han usado sus plataformas para ataques personales disfrazados de periodismo.

La audiencia de medidas de coerción se espera en las próximas horas en Santiago. Mientras tanto, Martínez permanece detenido bajo custodia del Ministerio Público.