Una noche de diversión se convirtió en tragedia en Cali, Colombia, cuando María José Ardila, una joven de 23 años, perdió la vida tras aceptar un reto de consumo extremo de alcohol en un bar de la ciudad. El desafío, que consistía en ingerir varias rondas de licor en menos de diez minutos, fue promovido y aplaudido por sus supuestos amigos y por el organizador del evento, quien incluso le prohibió beber agua durante la prueba.
Testigos relataron que María José debía tomar cerveza sin parar, tres shots sin usar las manos y un largo trago de aguardiente, además de otros ocho tragos combinados. Sin embargo, al llegar a la última ronda, la joven colapsó repentinamente y perdió el conocimiento. Según los informes médicos, sufrió una broncoaspiración que le provocó un paro respiratorio prolongado.
La familia denunció que los organizadores del reto abandonaron el lugar y dejaron sola a la joven mientras era trasladada de emergencia a un hospital, donde los médicos intentaron reanimarla tres veces sin éxito. Pese a los esfuerzos, María José fue declarada con muerte cerebral. Expertos en toxicología advirtieron que este tipo de retos, cada vez más comunes en redes sociales, pueden causar un colapso neurológico y cardíaco irreversible.
El caso ha generado indignación en Colombia, donde las autoridades investigan al bar y a los responsables del reto. Familiares de la víctima exigen justicia y piden que se tomen medidas para evitar que más jóvenes pongan su vida en riesgo por desafíos virales.
El padre de la joven, visiblemente afectado, relató entre lágrimas que su hija había salido de casa con la promesa de regresar temprano y que nunca imaginó que una simple salida con amigos terminaría en tragedia. “La vi morir tres veces en el hospital… y tengo un bebé de diez meses que ahora se quedó sin su mamá”, expresó con dolor.
Las autoridades locales anunciaron que investigarán tanto al establecimiento donde se realizó el reto como a las personas que lo promovieron, pues podrían enfrentar cargos por homicidio culposo. Además, especialistas y colectivos ciudadanos hicieron un llamado urgente a frenar la difusión de estos retos en redes sociales, recordando que el abuso de alcohol no es un juego, sino un riesgo mortal que sigue cobrando vidas jóvenes en todo el país.