El Embajador Wally Brewster Presuntamente Oficializó Una Boda Entre Dos Hombres En RD

Un gran revuelo ha causado en la República Dominicana la presunta celebración de una boda entre dos hombres, supuestamente oficiada por el exembajador de Estados Unidos en el país, James Wally Brewster. El acto habría tenido lugar en la ciudad de Santiago y fue difundido por el propio diplomático a través de su cuenta de Instagram, donde expresó que fue “un honor oficiar la boda en un hermoso entorno en Santiago, República Dominicana”.

El hecho desató fuertes críticas de líderes religiosos y legisladores, quienes calificaron la acción como un irrespeto a las leyes y tradiciones del país. El presidente del Consejo Dominicano de la Unidad Evangélica, Feliciano Lacen, catalogó el acto como “una afrenta a los principios de la nación y a la comunidad de fe”, asegurando que “en la República Dominicana nunca se aprobará el matrimonio igualitario”.

Ante la polémica, la Junta Central Electoral (JCE) emitió un comunicado recordando que, según la Constitución y las leyes vigentes, solo los oficiales del Estado civil o las iglesias acreditadas pueden celebrar matrimonios, y únicamente entre personas de distinto sexo. La institución subrayó que ningún matrimonio que viole este principio podrá ser registrado en territorio dominicano.

El sacerdote Fray Jorge Jiménez también opinó sobre el tema, señalando que no se debe dar trascendencia a un acto sin validez legal. “Esto está en contra de las leyes del país y de las normas universales de la Iglesia. No conozco bien el contexto para establecer un juicio, pero evidentemente es un acto que no debe ser considerado más allá de lo que es: una acción simbólica sin efectos jurídicos”, expresó.

Legisladores consultados calificaron la presunta ceremonia como un intento de provocar controversia. Algunos coincidieron en que, aunque respetan las preferencias personales de cada individuo, el país no está preparado social ni legalmente para este tipo de uniones. “Respeto las decisiones de cada quien, pero promover algo que choca con los valores y leyes dominicanas puede verse como una provocación”, señaló un congresista al ser abordado por la prensa.

La polémica revive el debate sobre los derechos de la comunidad LGBTQ+ en el país, donde aún no existe un marco legal que reconozca el matrimonio igualitario. Diversos sectores liberales han aprovechado el caso para insistir en la necesidad de abrir un diálogo sobre la igualdad de derechos civiles, mientras grupos conservadores reiteran su rechazo a cualquier intento de modificar la Constitución o las leyes que regulan el matrimonio en la República Dominicana.