Hombre Denuncia A Pastora Tras Confiarle A Su Hija Y Esta Ser Maltratada En Azua

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Un padre residente en una zona vulnerable del municipio cabecera de Azua denunció que una pastora traicionó su confianza al maltratar a su hija menor. El hombre explicó que permitió que la religiosa se llevara a la niña, de 13 años, a un campamento en Cotuí, sin imaginar que allí sería víctima de malos tratos.

Según su testimonio, la situación ha causado profunda indignación en la familia, que asegura haber confiado plenamente en la pastora por su papel dentro de la iglesia. El caso ha generado preocupación entre los vecinos, quienes piden que las autoridades investiguen lo ocurrido y protejan a la menor.

El padre relató que su hija regresó del viaje con visibles signos de tristeza y miedo, y que al preguntarle lo sucedido, la menor narró los episodios de maltrato físico y emocional sufridos durante el campamento. Indicó que la pastora la habría castigado de forma excesiva y la humillaba delante de otros niños por motivos que aún no están claros.

La familia acudió al Departamento de Protección a Niños, Niñas y Adolescentes en Azua para denunciar el caso, solicitando una investigación exhaustiva que determine las responsabilidades. “Mi hija confiaba en ella como una guía espiritual, no para que la lastimaran”, expresó el padre con evidente indignación.

Las autoridades informaron que ya iniciaron las indagatorias para verificar las denuncias y garantizar la seguridad de la menor. Mientras tanto, la niña recibe atención psicológica y acompañamiento del Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI).

El hecho ha provocado consternación en la comunidad, donde los vecinos exigen justicia y una mayor supervisión de las actividades religiosas que involucran a menores. “Esto no puede quedar impune, porque muchos padres confían en estas personas por su fe”, expresó una residente del sector, pidiendo sanciones ejemplares si se comprueba la acusación.

Hasta el momento, la pastora señalada no ha ofrecido declaraciones públicas sobre las acusaciones, pero las autoridades confirmaron que será citada para rendir su versión de los hechos. La población de Azua sigue atenta al desarrollo del caso, que ha reavivado el debate sobre la responsabilidad de las instituciones religiosas en la protección de los menores bajo su cuidado.