Presidente Abinader Destituye A Dos Funcionarios Por Los Apagones

El presidente Luis Abinader destituyó este lunes a dos altos funcionarios del sector eléctrico y del transporte masivo, marcando las primeras consecuencias oficiales tras el apagón nacional y la falla del Metro de Santo Domingo que paralizó parte del país la semana pasada. Mediante decreto, fueron removidos Martín Robles, administrador de la ETET (Empresa de Transmisión Eléctrica), y Rafael Santos Pérez, director de la OPRET, entidades señaladas por fallos críticos que desencadenaron la crisis.

En sustitución de Santos Pérez, Abinader designó a Yael Isa Taveras, quien asumirá simultáneamente la dirección de la OPRET y continuará como titular honorífico del Fideicomiso para el Desarrollo del Transporte Masivo (FITRAN), responsable de proyectos como el monorriel. En la ETET fue nombrado Alfonso Rodríguez Tejada, quien tendrá la misión de corregir los errores operativos que provocaron la caída del sistema el pasado martes.

La medida llega en medio de fuertes críticas ciudadanas, luego de que se revelara que las plantas de emergencia del Metro tenían más de 11 años sin encenderse, con combustible vencido y sin mantenimiento. La propia OPRET admitió posteriormente que los sistemas de respaldo —unos 42 megas de generación— estaban fuera de servicio por falta de supervisión. La falla provocó que cientos de pasajeros quedaran atrapados en estaciones y vagones durante horas.

Al mismo tiempo, el apagón nacional tuvo origen en una subestación de la ETET en San Pedro de Macorís, donde se produjo un error aún bajo investigación. Aunque una viceministra atribuyó la situación a “error humano”, el Ministerio de Energía y Minas lo desmintió y pidió dos semanas para ofrecer un informe definitivo. Sin embargo, un análisis técnico divulgado por la UASD ya concluyó que la caída del sistema fue provocada precisamente por una falla operativa.

El Colegio de Abogados, sectores empresariales y voces de la sociedad civil habían exigido responsabilidades, mientras aumentaba la presión pública por las fallas acumuladas en el sistema eléctrico y de transporte. Con las destituciones, el Gobierno busca enviar una señal de control y respuesta ante lo que muchos consideran la peor crisis técnica de los últimos años.

Aún así, expertos advierten que el problema es estructural y exige cambios profundos en protocolos, mantenimiento y gobernanza de los sistemas. Mientras tanto, la población espera que las nuevas autoridades garanticen estabilidad y que episodios como el apagón nacional no se repitan.