Presidente De La Mesa Para Las Migraciones Criticó Que Quieran Bloquear Marcha De Descendientes Haitianos

En el marco de una nueva convocatoria por parte de la organización Antigua Orden Dominicana, que ha anunciado su intención de marchar para solicitar la nacionalidad para sus miembros descendientes de haitianos, el presidente de la Mesa para las Migraciones, William Charpentier, se pronunció este viernes en contra de los intentos de bloquear esta protesta pacífica.

Charpentier expresó que todas las organizaciones tienen derecho a ejercer su derecho a la manifestación, el cual está garantizado por la Constitución de la República. “Creo que todos los grupos tienen derecho a hablar, protestar, y manifestarse. Eso está consagrado en la Constitución. La manifestación de querer bloquear la protesta de otro grupo es una muestra de intolerancia”, afirmó.

A pesar de criticar el intento de prohibir la marcha, Charpentier hizo un llamado a los descendientes haitianos para que suspendieran la movilización programada para evitar posibles confrontaciones con otras agrupaciones en el Parque Independencia, un espacio público que podría ser escenario de enfrentamientos. “La idea no es generar confrontación ni que se derrame sangre. Debemos evitar, por todos los medios, que el ejercicio de un derecho constitucional se convierta en violencia”, agregó.

Este llamado a la paz ocurre luego de que el líder nacionalista Pellegrín Castillo sugiriera que se prohibiera la protesta, argumentando que en el contexto actual, donde se perciben tensiones con sectores haitianos en la República Dominicana, dicha marcha podría alimentar la “tendencia insurrecional” en algunos sectores haitianos.

La protesta de los descendientes haitianos ha sido un tema de discusión durante más de diez años, en los cuales han luchado por obtener el reconocimiento de su nacionalidad dominicana y la posibilidad de acceder a los derechos civiles que les corresponden. La marcha está programada para comenzar a las 10 de la mañana, y los organizadores esperan que más de un centenar de personas se movilicen en demanda de su derecho a la nacionalidad.

La polémica sobre este evento refleja la creciente división en la sociedad dominicana sobre la cuestión migratoria y el reconocimiento de los derechos de los descendientes de haitianos. Mientras tanto, las autoridades mantienen vigilancia para evitar disturbios durante la manifestación.