Rosendo Tavárez: “Más De La Mitad De Los Latinos Que Apoyaron A Trump Hoy Lo Lamentan”

El comunicador Rosendo Tabárez afirmó que “más de la mitad de los latinos que apoyaron a Donald Trump hoy están arrepentidos”, al analizar en el programa Z Digital el panorama político de Estados Unidos, la situación económica y las recientes decisiones del expresidente estadounidense. Sus declaraciones se dieron en medio de un debate que incluyó temas deportivos, el funeral de Dick Cheney y la firma de la denominada Ley de Archivos de Einstein, que obliga a publicar documentos históricos.

Durante la discusión, Tabárez destacó que muchos hispanos que votaron por Trump “se sienten decepcionados” al considerar que las promesas de campaña no se cumplieron, resaltando que “las acciones los pusieron de estúpidos, no de estúpidos, no, pero ya es tarde para hablar”, en referencia a los efectos que, a su juicio, han tenido las políticas del exmandatario sobre las comunidades latinas.

El comunicador también cuestionó el manejo económico de la administración Trump, asegurando que “la economía de Estados Unidos está hecha un desastre ahora mismo” y que “la gente está pasando hambre”, pese a que otros panelistas resaltaron la estabilidad del precio del combustible en los últimos años. Tabárez insistió en que la inflación y el costo de vida continúan afectando fuertemente a las familias hispanas.

En otro punto del programa, el comentarista analizó la exclusión de Trump del funeral del exvicepresidente Dick Cheney, recordando los fuertes conflictos de la familia Cheney con el exmandatario. Más adelante abordó la polémica firma de la Ley de Archivos de Einstein —la cual obliga a la publicación de documentos federales clasificados—, asegurando que Trump la aprobó “de un pique” y presionado por su propio partido.

Tabárez concluyó señalando que la política estadounidense vive un momento tenso y decisivo: “Ahora es que falta mambo. Vamos a ver qué va a pasar con lo que viene después de esta ley”. Según el comunicador, la apertura de archivos históricos podría desencadenar nuevas controversias en Washington.