El miedo a ser deportadas ha generado pánico entre las parturientas haitianas en la República Dominicana, provocando que muchas eviten acudir a los hospitales y opten por pagar taxis privados para evitar ser detenidas por las autoridades de la Dirección General de Migración.
Rossy Belinda, una mujer haitiana que dio a luz hace diez días, compartió su experiencia al visitar a su médico acompañada de su hermana. “Yo pago mucho dinero para llegar allí y pago taxis para ir al hospital con mi bebé porque ella está mal y no puedo salir cuando migración está cerca”, explicó Belinda, quien asegura que prefiere pagar un transporte privado para no arriesgarse a ser deportada.
Las mujeres haitianas expresan que, pese a tener que pedir dinero prestado para costear estos traslados, prefieren sacrificarse antes que exponerse en el transporte público. Lovely Gay, otra inmigrante haitiana, relató que conoce casos de compatriotas que han dado a luz en sus propias viviendas, ya que no tienen los recursos para pagar transporte privado ni arriesgarse a ser detenidas en controles migratorios.
