José Laluz aseguró que el trágico accidente ocurrido en Verón-Punta Cana el pasado fin de semana, donde murieron al menos seis personas, pudo haberse evitado si existieran controles efectivos y políticas modernas de tránsito. Recordó además que la zona ya había sido escenario de un accidente similar en 2022, cuando un autobús turístico se volcó provocando la muerte de varios extranjeros.
Laluz criticó las condiciones de las carreteras en la zona de Bávaro-Punta Cana, denunciando mala iluminación, señalización deficiente y un diseño inadecuado que, según él, incrementa el riesgo de siniestros. A esto se suma la imprudencia de choferes bajo los efectos del alcohol, vehículos sobrecargados con pasajeros en la parte trasera y motociclistas sin casco, factores que estuvieron presentes en el reciente accidente.
Reiteró su propuesta de implementar un marbete electrónico con sensores que permita monitorear en tiempo real el comportamiento vial de los conductores, lo que facilitaría detectar reincidencias, exceso de velocidad y maniobras peligrosas. Según explicó, esta herramienta funcionaría como un “agente virtual” dentro de cada vehículo y permitiría reducir drásticamente las muertes en carretera.
Finalmente, Laluz llamó al Gobierno a declarar el tránsito y el transporte como un estado de emergencia nacional, argumentando que en República Dominicana mueren en promedio ocho personas al día por accidentes viales, una cifra que, en solo dos años, supera a las muertes por COVID-19 registradas en el país durante tres años de pandemia.
Laluz también advirtió que la República Dominicana es vista a nivel internacional como uno de los países más peligrosos para conducir, lo que afecta no solo a la seguridad de los ciudadanos, sino también a la imagen del turismo, sector fundamental para la economía. Subrayó que destinos como Punta Cana no pueden darse el lujo de cargar con titulares de accidentes fatales de manera recurrente.
En ese sentido, instó al Congreso y al Poder Ejecutivo a trabajar de forma coordinada en una reforma integral del sistema de tránsito, que contemple desde infraestructura vial moderna hasta un régimen de sanciones más severo para quienes violen las normas. Aseguró que sin voluntad política, la República Dominicana seguirá “enterrando jóvenes, turistas y familias completas por culpa del desorden en las calles”.